¿Qué son las terapias contextuales de 3ª generación?
Este tipo de terapias están orientadas a aliviar el sufrimiento humano dentro de sus múltiples formas. Pueden abordar una amplia gama, ya que se centra en cómo nos relacionamos con nuestras emociones, sensaciones y pensamientos. También nos ayuda a identificar lo que realmente queremos nosotros y no seguir simplemente el capricho social.
¿En qué te puedo ayudar?
Trabajamos desde ACT y FAP las cuales son terapias transdiagnósticas, esto es, trabajamos más allá de la etiqueta diagnóstica, nuestra meta es ayudar a las personas a vivir con mayor flexibilidad psicológica y darle sentido a sus vidas.
¿A qué se refiere la palabra “3ª generación”?
3ª generación se refiere a que han existido 2 generaciones previas de terapia en donde la evidencia científica demostró que funcionaba. En la primera generación se trabajaban con problemáticas en dónde el terapeuta podía estar con el consultante en su ambiente natural (como en una escuela, hospital o institución). En la segunda generación, el tratamiento se daba a través de la palabra, pero los terapeutas le llamaron “distorsiones” a la forma en la que pensaban los consultantes y se orientaban en la reducción de síntomas. En la 3ª generación, la evidencia aún nos respalda y no creemos que la gente “distorsione” las cosas, creemos que la gente ve el mundo de cierta forma porque ha tenido una historia que le ha llevado a verlo así. Tratamos de explorar el sufrimiento en su totalidad. Y nos dedicamos a darle un sentido a la vida de las personas, cuando tienen sentido, de forma colateral el sufrimiento disminuye.
La Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT por sus siglas en inglés) se basa en la premisa de que el sufrimiento humano es inevitable y que intentar eliminarlo o evitarlo solo empeora la situación. En ACT, aprendemos a relacionarnos de forma distinta con nuestros pensamientos, emociones y sensaciones, incluso aquellos que nos causan malestar. De esta forma, podemos dedicar nuestros esfuerzos y atención para vivir de acuerdo con aquello que le da sentido a nuestras vidas.
La Psicoterapia Analítico Funcional (FAP, por sus siglas en inglés) pone su énfasis en el vínculo terapéutico con una premisa fundamental: como actúes afuera del consultorio, lo harás dentro, pues está muy automatizado. El cambio terapéutico se da a través de la relación que se fomente en las sesiones. No interactuarás con una máquina, sino con un ser humano.
¿Es una terapia con evidencia científica?
Sí. ACT tiene un gran soporte empírico. A la fecha existen más de 1000 artículos publicados en revistas internacionales que hablan de su eficacia. Si bien no es para todos los problemas que tienen las personas, sí para una gran mayoría. Puedes acceder a una lista completa de la evidencia aquí.
FAP también se considera como un terapia basada en evidencia pues además se conocen cuáles son los procesos que provocan la mejoría en las personas.
¿Cómo es la forma de trabajo?
En las primeras sesiones tomaremos algunos datos sobre tu historia de vida y tu problema actual. Nuestra primera gran labor es crear un ambiente cómodo y confiable para ti, de forma que sea más sencillo contar aquello que te está llevando al sufrimiento. Es importante que ambos estemos en la misma sintonía sobre cómo observaremos una mejoría en tu vida.
¿Si voy a terapia significa que estoy descompuestx?
No. Ir a terapia no significa que estés descompuestx, significa que estás atascadx. Los humanos nos atascamos cuando atravesamos grandes transiciones, sea cambiar de empleo, cambiarse de hogar, perder una relación significativa, perder un ser querido, etc. En la terapia exploraremos qué cosas estás haciendo que te mantienen atascado y qué cosas has dejado de hacer o podrías empezar a hacer que te ayuden a salir del atasco.